viernes, 17 de enero de 2014

Mi PLE en el curso MOOC Educalab

Es muy probable que conozcáis el curso MOOC sobre Entornos Personales de Aprendizaje (PLE) que está desarrollando el INTEF para que los docentes mejoren sus competencias digitales. Dentro de este curso la primera tarea consiste en explicitar el propio entorno de aprendizaje y reflexionar sobre sus puntos fuertes (y débiles), así como recoger la identidad digital en docente.me: podéis encontrar mi perfil y recursos en  docente.me

En cuanto al PLE, recientemente recogí algunos recursos de interés para acercarse a los PLE en el ámbito educativo. Bajo mi punto de vista, el PLE sobrepasa cualquiera de las etiquetas del aprendizaje (e-learning, m-learning, u-learning) porque en realidad se refiere al contexto en que se da ese aprendizaje continuo y ese contexto siempre es multiplataforma, multicanal y podríamos decir ubicuo. Es evidente que la tecnología juega un papel nuclear en la configuración del PLE, así que no voy a extenderme en ello. Sin embargo, por mucho que abarque la tecnología, siempre habrá una parcela de nuestro PLE vinculada a lo presencial, a lo sensorial, a lo humano. Aprendemos a veces como los filósofos antiguos, paseando por una ciudad o por el campo y relacionando fenómenos que no vienen dados por entornos de aprendizaje explícitos. El PLE también incluye asistir a eventos culturales o artísticos, charlar con compañeros en entornos informales, escuchar las experiencias del cole de tus hijos...


Tenía pendiente desde hace años 'mapear' mi PLE, algo que siempre me ha producido pereza y vértigo en dosis similares. Conozco buenas herramientas para ello y creo que sería capaz de evidenciar muchas de las ramas con que se nutre mi PLE. Sin embargo, me parece una tarea condenada al fracaso a menos que me la tome con cierto compromiso de revisión y actualización, pues mi PLE va cambiando mes a mes con una plasticidad fabulosa. Aprovechando este curso he esbozado ese mapa imperfecto con la herramienta Coogle, y este ha sido el resultado:




Por lo que respecta a mi competencia digital, creo que llevar ya ocho años inmerso en las redes educativas y en el mundo de las TIC en el aula me ha proporcionado unos niveles satisfactorios, tanto como usuario como formador. Sin embargo, dos puntos débiles amenazan esa competencia: El primero es la gestión de la identidad digital. Aunque llevo años trabajando con perfiles diversos (blog de profe, blog de aula, revista del centro, departamento de lengua, twitter, facebook, etc.) creo que mi gestión de esa identidad podría mejorar si racionalizase cuentas de usuario y recursos dispersos. El segundo punto débil es la organización y gestión de grupos de trabajo, sean de alumnos o de colegas. Creo que en las dinámicas de grupos es muy complejo establecer flujos que animen a que todos participen. Probablemente obedece a nuestra proverbial manía de trabajar como lobos solitarios. También en esto debo mejorar.

Por último, también queda constancia aquí de mi nube de intereses, realizada con Tagxedo:


6 comentarios:

  1. Gracias por compartir experiencia. Es cierto lo de los lobos solitarios... aunque nuca hayamos estado tan conectados... paradojas de la tecnología

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  2. Gracias por el comentario: ahora no me siento tan solo :)

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  3. Excelente blog muy estético y con muchas ideas clave...

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  4. Ocho años en las redes te da la confianza de realizar tan excelente trabajo, felicidades. Yo empiezo el viaje por estos senderos y espero no perderme ni optar por aullarle a la luna. saludos desde Michoacán, México.

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  5. Gracias, Benjamín. En verdad, es un trayecto largo y paciente, pero al final va dando sus frutos. Buen viaje.

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